TRIC. Uso en los menores, ¿SI o NO?
Ahí un dilema respecto al uso de las TRIC (Tecnologías de la Relación, la Información y la Comunicación) en los/as menores, al igual que es importante tener en cuenta la repercusión en el desarrollo psicomotor, el lenguaje, gestión de sus emociones y en el vínculo de apego, también es significativo y se debe considerar que a edades muy tempranas se puede ir incorporando su uso, supervisado por un adulto. Las TRIC pueden tener una finalidad educativa en el desarrollo creativo del niño/a, a la vez que se estimula esa necesidad esencial que tienen hacia la creatividad, como ejemplo: existen juegos que dan la oportunidad de diseñar en 3D, construir metrópolis, programar etc. (…), y así evitar un uso poco educativo para facilitar que los/las menores coman, interactúen con los demás y con los objetos de su alrededor.
A continuación,hago referencia a opiniones de tres expertos, que tienen una visión preventiva y educativa en su uso:
Para Mario Fernández (neurocientífico de la Universidad Autónoma de Madrid),comenta que “lo primero que hay que hacer es entender que la tecnología ha venido para quedarse. Si a tu hijo/a no le das un móvil cuando el resto de compañeros/as lo tienen, entonces le estás perjudicando. Lo que hay que hacer es enseñarle que esto es una herramienta, no un fin”.
María Salmerón(Pediatra), añade: “Sería un error intentar aislar al niño/a de algo que le va a llegar, y que puede provocar riesgos mayores. La tecnología es algo que va a necesitar”.
“Piensa en el papel que la tecnología juega hoy en tu familia. ¿Tienes que discutir para desconectar? Entonces igual habría que revisar las reglas de casa. ¿Te traes trabajo de la oficina y mandas mensajes mientras cenas? Entonces quizás debieras de reorganizar tu horario laboral”, afirma Anya Kamenetz, (periodista experta en educación y autora del libro The Art of Screen Time: HowYourFamily Can Balance Digital Media and Real Life).
¿CÓMO, ENTONCES, INCORPORAR LAS NUEVAS TECNOLOGÍAS DE UNA MANERA BENEFICIOSA PARA LA FAMILIA?
No es educativo el poner limitaciones basadas en el tiempo, padres y madres deben ayudar a los hijos/as a decidir lo que quieren hacer, adoptando un rol creativo. Los adultos deben de usar juntos con los/las menores las pantallas para conectarse, para crear, buscar nuevas ideas, divertirse o ver vídeos en YouTube, por ejemplo. Además es primordial equilibrar ese uso con el tiempo que se pasa teniendo contacto presencial con alguien, al aire libre, en encuentros familiares, leyendo etc.… debe de haber un tiempo y un espacio para hacer de todo. Conseguir el equilibrio entre la parte educativa del uso de las TRIC y el desarrollo del o la menor con actividades de ocio, estudio, de comunicación etc.… No es una cosa ni la otra.
Todo esto implica tener rutinas familiares bien establecidas, lo que conlleva disciplina tanto para menores como para adultos. Establecer un tiempo donde esté prohibido el uso de las TRIC como puede ser la hora de comer, el tiempo de ocio al aire libre, el deporte, etc (…).
El juego al aire libre, con otras personas (a ser posible de diferentes edades) sigue siendo lo más beneficioso para cualquier persona, porque aviva lo que un niño o niña necesita: la búsqueda de amistades, el ponerse en el lugar del otro/a, la amistad, la colaboración, aprender a relacionarse…pero el jugar a un juego de mesa y jugar con un videojuego, también son viables, se puede hacer una cosa y la otra.
Muchos educadores/as ven contradicciones respecto al uso de los videojuegos, ya que se considera que haciendo un uso responsable pueden tener un sentido pedagógico, y existen varios estudios para rechazar que la violencia de algunos juegos se traslade a la vida real. No existe diferencias a nivel emocional ni cognitivo para el cerebro entre matar monstruos en una videoconsola o leer libros donde se mata al enemigo como puede ser un libro de aventuras como “El señor de los Anillos”.
Los videojuegos también tienen aspectos positivos en la evolución cognitiva del niño/a, mejorando su visión, el tiempo de respuesta, estrategias para la consecución de objetivos, la colaboración con otras personas, a interactuar, capacitarte de liderazgo, empatizar etc., aún teniendo estos aspectos positivos no hayque olvidar que el tiempo que los/as menores pasa con las TRIC debe de ser acorde a las rutinas diarias familiares (hora de cena, momentos de relajación, responsabilidades,….).
El uso de las nuevas tecnologías como es sabido tiene sus riesgos, según el estudio de Go Mobile (2018), no son los menores que mayor tiempo pasan conectados los que más problemas pueden tener, ya que esto les ayuda a aumentar su resiliencia.
El uso de las redes sociales es más peligroso que el uso de los videojuegos, ejemplos como: la opción de que no percibas el reconocimiento que deseas por parte de los amigos virtuales, o un cierto número de likes influye en la autoestima del o la menor, personas que no tienen buenas intenciones, entre otros riesgos.
¿EN QUE MOMENTO EMPIEZA EL RIESGO?
En el momento que el/la menor empieza a hacer uso de internet de forma autónoma, donde además los padres y madres no son conscientes de donde ni a qué se exponen. El impacto dependerá de la edad del niño/a o de su grado de madurez, entre otros factores. Y aunque existen filtros de control parental, muchos/as menores a partir de los 10 años aprenden a desactivar estos programas.Al final, lo que más importa es la educación previa que se haya hecho en casa con el niño/a (enseñarle a no compartir datos personales, fotos etc…).
Otro peligro, es el de la conducta adictiva que pueda generar internet. Según los estudios realizados esta se sitúa en un uno por ciento, que si lo piensas no es poco. Por otro lado, no es igual el/la niño/a que usa mucho las TRIC dentro de una actividad normal que aquel o aquella que está aislado/a socialmente, que usa las nuevas tecnologías más tiempo de lo que debiera y que puede llegar a sufrir con su carencia un verdadero síndrome de abstinencia.
¿QUÉ PAUTAS DE PROTECCIÓN PODEMOS LLEVAR A CABO?
Las medidas de protección ayudan a prevenir los riesgos que suponen las TRIC para los/las menores, por lo que es necesario que los padres / madres los tengan muy presentes.
- Potenciar habilidades personales: como la autoestima, asertividad, habilidades sociales y de solución de problemas. Para los/as menores es importante aprender habilidades que le permitan relacionarse de forma adecuada en su entorno y así conseguir una red social que le permita centrar sus actividades de ocio lejos del uso de los videojuegos.
- Conocer el contenido del juego/videojuegos: en Europa se ha creado un código de regulación de videojuegos, el PEGI, cuyo objetivo es proporcionar información sobre los contenidos y las edades recomen-dadas de éstos. El código PEGI nos ofrece dos tipos de información: edad recomendada y con-tenidos del juego. Con respecto a la edad, es posible clasificar un juego dentro de cinco categorías (3, 7, 12, 16 y 18) que indican los años a partir de los cuales el juego se considera adecuado.
- Tiempo de utilización: es aconsejable por cada hora de juego, 15 minutos aproximadamente de descanso, no excederse entre 30 y 60 minutos de juego al día, hay que tener en cuenta que también hay otras responsabilidades que llevar a cabo del día, encontrar el equilibrio en nuestras tareas facilitará que no se haga un uso excesivo de las TRIC.
- No prohibir ni censurar: se tiene que educar en un buen uso, la sociedad actual y futura, nos exige mayor formación y conocimientos respecto al uso de las tecnologías, por lo que es impepinable su uso, es por ello que los/as menores deben de tener una buena formación y que los padres/madres los enseñen a ser un uso responsable.
- Diálogo con nuestros hijos e hijas: la comunicación facilitará un clima favorable de convivencia. No se trata solo de hablar con ellos/as, sino también de escuchar.
- No al videojuego como beneficio del/a adulto/a: no es recomendable utilizar las videoconsolas como recompensa o castigo, ya que se les otorga más valor del que tienen. Cuando estés cansado/a, tengas poco tiempo o sientas que tus hijos/as te sacan de las casillas, no te veas tentando/a a entretenerlos con la consola. Como adulto que establece límites para educar, tus actos deben ser consistentes con lo que dices. Si los dejas jugar más tiempo del establecido cuanto te conviene, entonces no estarás respetando el límite. No puedes esperar entonces que tus hijos/as lo respeten.
- Potenciar la vida en familia: la familia es la estructura social básica, es donde se producen los aprendizajes más importantes para la vida, cómo son los valores. Es importante que en el ámbito familiar se potencia las relaciones interpersonales entre los padres/madres e hijos/as, donde se comparta momentos de dialogo, de ocio…, esto ayudará a la educación de los padres/madres.
- Estar atento/a ante cambios de comportamiento: aparecerá cambios emocionales, cambios en los hábitos y en la rutina de la vida diaria, cambios físicos etc…, el/la menor se irá aislando de la familia y amigos.
- Espacio físico de uso: evitar que esté todo el tiempo encerrado o encerrada (en la habitación donde duermen), es preferible que su uso sea en el salón o zona de uso común.
Equipo de Prevención Proyecto Hombre Córdoba
Por: Miguel Ángel Martínez Caballero